Por lo general la mayoría de las veces la tos no es un síntoma grave y se puede aliviar con algunos simples remedios caseros. Esta se puede hacer presente por los cambios de temperatura o una infección, pero en la mayoría de los casos tiene que tratarse como una enfermedad y no descuidarla, acudir al médico y tomar los medicamentos que indique, o bien ir a la medicina alternativa, como en este caso hicimos nosotros.
Una de las causas más comunes de la tos es el resfriado y la gripe, una vez que existe la presencia de estos virus, ocurre una inflamación e irritación en las vías respiratorias superiores, por lo regular esto es acompañado por la producción de mucosidades. Pero también a través de la tos tu organismo puede eliminar las mucosidades, mientras que si se trata de una tos seca debes de inmediato tratar de pararla para aliviar la garganta y evitar otras lesiones.
Hay otras causas más serias que pueden estimular la tos como bronquitis, neumonía, asma y cáncer en el pulmón. Si la tos que tienes no se debe a que estas resfriado, entonces debes ir con un médico que te examinará y servirá para asegurarte de que no esté siendo causada por algo más serio. Asimismo si la tos dura más de dos semanas o te sale con sangre es necesario buscar atención medica de inmediato.
La tos puede llegar a ser muy molesta e incómoda y más si tienes que ir a trabajar o a la universidad, pero no es recomendable pararla cuando se trata de una tos con flema, lo ideal es que esta continúe, ya que es una acción del sistema inmunitario para expulsar microorganismo, polvos y otras sustancias presentes en estas vías, a su vez puede incluso eliminar objetos extraños que estén en el lugar equivocado como restos de comida o líquidos.
Antes de tratar cualquier tipo de tos se debe reconsiderar la causa, si es por alguna alergia se debe eliminar la alergia, pero si es por algún virus como el resfriado no se debe tratar de reprimís la tos del todo.
La idea es aliviarla de manera que no sea tan incómoda, pero permitir que el sistema inmune use sus armas para defenderse:
- Aplica en el pecho cataplasmas bien calientes de puré de patata o arcilla medicinal.
- Efectúa inhalaciones con una solución salina.
- En un recipiente calentar durante 10 minutos medio vaso de agua y añadirle dos dientes de ajo o cebolla finamente picados, agregas tres cucharadas de agua y dejas que se enfríe, tomas dos cucharadas al día. Recordemos que el ajo y la cebolla funcionan como antisépticos y desinflamatorios.