La lepra es enfermedad infecto-contagiosa, que se presenta con una mayor prevalencia en las áreas sociales de bajo nivel, donde la desnutrición, enfermedades y sobrepoblación son factores para que haya una fuerte predisposición a padecerla. La lepra es causada por el bacilo de hansen. Este bacilo tiene afinidad por el tejido de la piel y sistema nervioso periférico y puede afectar a otros órganos tales como: los testículos, hígados y los ojos. La lepra no es una enfermedad hereditaria.
El modo de transmisión de esta enfermedad es principalmente por las vías respiratorias y la piel. El contagio se producirá si hay contacto íntimo prolongado.
El período de incubación de la enfermedad es de no más de 5 años. Los signos de manifestación de la enfermedad son: aparición de latente manchas rojiza o color blanquecino en cualquier parte del cuerpo, las placas, bultos, hinchazón, debilidad muscular puede constituir los otros síntomas de la enfermedad.
Las lesiones de la lepra si no se tratan pueden causar complicaciones tales como: parálisis de las manos, pérdida de dedos o extremos distales y ceguera.
El diagnóstico de la enfermedad se produce principalmente a través de la examinación física, donde se analiza la sensibilidad del individuo. El Análisis de sensibilidad térmica se realiza con dos frascos, uno con agua caliente y el otro con agua fría. El análisis de sensibilidad dolorosa se realiza con una aguja, toca el área lesionada con la mismo.
El análisis de sensibilidad táctil se realiza pasando por algodón sobre la piel siendo examinado y en la piel normal.
También se realizan otros métodos para el diagnóstico de la enfermedad como: aplicación de pruebas de fuerza del motor y la palpación de los nervios y los brazos, las piernas y los ojos. Las pruebas de laboratorio y la biopsia pueden ser necesarias para proporcionar el diagnóstico más preciso.
El tratamiento de la enfermedad es importante para que no haya la transmisión a otras personas, ya que aproximadamente el 95% de los parásitos son eliminados en la primera dosis de tratamiento, y aun si puede ser capaz de infectar a otras personas. El tratamiento puede durar hasta un año, y el seguimiento del paciente con el tratamiento correctamente puede curar la enfermedad. Así que es importante buscar ayuda médica para evitar la evolución de la enfermedad y la transmisión a otras personas.
Las medicinas usadas para el tratamiento de esta enfermedad en muchos casos son gratuitas o a un bajísimo coste y no hay necesidad para aislar a los enfermos.
me gusto muchas gracias por la informacion